Una fuerte tormenta, que llegó por el oeste, azotó este miércoles por la tarde-noche a Rosario de Lerma, provocando graves daños en la infraestructura y el arbolado público. La lluvia comenzó a las 19:30 y en solo media hora descargó entre 30 y 60 mm de agua, acompañada de fuertes ráfagas de viento y de una intensa actividad eléctrica. Todo Rosario se vio afectado y sumido en la oscuridad. Hoy, la suciedad es la huella que dejó la tormenta.
El temporal causó la caída de más de 30 árboles, algunos de ellos de gran porte y antigüedad, que arrastraron postes y cables del tendido eléctrico, dejando sin luz a toda la ciudad. También se registraron calles inundadas y carteles arrancados. Una de las zonas más afectadas fue la del cementerio, donde la tormenta cortó la circulación de varias arterias y arrasó con el arbolado del lugar. Situación similar se vivió en el barrio San Jorge, camino a Carabajal y en la zona de La Florida sobre la ruta 36.
La intransitabilidad de la ruta nacional 68 y de la provincial 36, por la caída de árboles y postes, dejó aislado además a la zona sur del Valle de Lerma, dificultando el acceso de la ayuda y los servicios de emergencia, por varias horas. A pesar de la magnitud del fenómeno, no se reportaron autoevacuados ni lesionados, aunque sí muchos vecinos complicados por la situación. Y mucha basura, lodo y ripio en las calles.
Valle de Lerma Hoy
