El 2 de julio del 2021, Abel Burgos salió de su casa en Cerro Negro del Tirao para nunca regregar. En febrero pasado, a casi tres años de su desaparición, un baqueano se encontró con sus restos en la cima del Cerro Negro del Tirao a más de cinco mil metros de altura, en una zona de difícil acceso, perteneciente a Rosario de Lerma.
En base a los análisis genéticos realizados por el Servicio de Biología Molecular Forense del Cuerpo de Investigaciones Fiscales, se pudo comprobar que los restos son compatibles biológicamente con la madre de Abel Burgos; además, en el lugar del hallazgo se encontraron prendas de vestir y un arma, las cuales fueron reconocidas por los familiares.
Valle de Lerma Hoy