La situación de los mineros en la puna salteña es de cuidado. Mientras las empresas sacan comunicados alegando que todos los mecanismos de aislamiento, prevención y cuidado de los trabajadores son efectivos, la historia que se cuenta en las minas es otra.
Aunque se han adaptado turnos, se trabaja con la mitad del personal y se redujeron las operaciones, muchos trabajadores de las minas continúan expuestos. El mejor ejemplo es lo sucedido en las últimas horas en Mansfield. Los mineros desde hace un año, cuando los primeros casos de covid19 se dieron en algunas minas de la Puna, venían reclamando mejores condiciones y medidas más fuertes de control por parte de las autoridades.
Pero las medidas de resguardo se relajaron en las últimas semanas, sostienen algunos trabajadores. El distanciamiento social en los colectivos de traslado del personal empezó a ser mínimo; los días de cuarentena para subir o bajar de la mina se redujeron y en el medio, cada uno de los empleados sumamente expuesto a los contagios. Las autoridades de control también se relajaron, los reportes de covid19 en minas daban negativos pero en los últimos días, según información de los propios mineros, minas como Pionero y Litio Minera, ambas ubicadas en el departamento Los Andes, han presentado casos de covid-19.
El virus vuelve a avanzar con fuerza en todo el país, el paralelo con esta misma época del 2020 es impresionante. La diferencia radica en la experiencia que todo el sistema sanitario y las autoridades de control tienen sobre esta enfermedad. Hoy ya no se trata de distanciamiento y testeos, se trata de responsabilidades y autoridades que sostengan cada una de las decisiones necesarias para que esta nueva ola no golpee de forma tan violenta.
Valle de Lerma hoy
