Un enorme cráter en una arteria muy transitada en la ciudad y otros tantos pozos abandonados a cielo abierto hace alrededor de dos semanas por operarios de Aguas del Norte presagian que el servicio sigue con inconvenientes en esta comunidad de 40 mil habitantes. A esto se suman las enormes perforaciones que quedan a cielo abierto. Inseguras, sin señalización y sin saber cuándo rellenan esos cráteres contaminados de bichitos y agua estancada. Sobre la calle Hipólito Yrigoyen esquina Virgilio Tedín obstaculiza el camino a vehículos y peatones. Pero también perjudica a los vecinos de estos frentes de viviendas con la aparición de grietas y humedad.
La perforación llega a seis metros de ancho por dos de profundidad. La tierra excavada amontonada a un costado del pozo es un peligro latente para los vecinos. Algunos reclamos llegaron a las oficinas de Aguas del Norte por parte de un vecino en particular. La respuesta a los pocos días fue determinante: “Debe regularizar su situación con Aguas del Norte”.
Esta familia afectada directamente por el pozo en medio de la calle y su vereda no quiso entrar en detalles de su reclamo ante el temor de represalias; “no quiero hablar de esta empresa. Hice un reclamo por este pozo y a los días me intimaron”, dijo. El vecino no dio su nombre pero se entiende de quién se trata por la ubicación de su domicilio. Precisamente su inmueble sufre las consecuencias de las perforaciones de Aguas del Norte en busca de las cañerías rotas en esta zona. Por esta misma arteria surgen otros arreglos a medias con recurrentes pérdidas de agua. El 27 de marzo pasado reventó una válvula en estas redes. Aunque el servicio se normalizó, la baja de presión y los pozos dejados a medias presagian que los cortes continuarán en esta ciudad.
Valle de Lerma Hoy