Esta situación se viene dando desde el 2020, se repitió en el 2021 y hasta el momento el único presupuesto aprobado y con el que se viene manejando el municipio es el de 2019. Y como el presupuesto 2022 sigue esperando ser tratado en comisión, no fue rechazado ni aprobado (aún), los vecinos no pueden pagar los impuestos ni siquiera con la tasa del 2019.
Al final parece que la situación en el Concejo Deliberante no ha cambiado demasiado, simplemente hubo un recambio de nombres, pero no así de seriedad y de respeto por la institucionalidad de El Concejo Deliberante y por los vecinos del municipio que hacen de rehenes desde hace varios años a los juegos y caprichos de los políticos.
Desde el área de renta se está especulando con lo que va a pasar el día jueves en el Concejo Deliberante rosarino; si es que va a sesionar al fin el cuerpo de Concejales, y si se va a aprobar este presupuesto o lo van a rechazar; de ser rechazado todo se debería retrotraer hacia al presupuesto del 2019 (por tercer año consecutivo).
El presupuesto 2022 presentado en diciembre pasado sigue dormido, y teniendo en cuenta que los impuestos son la fuente de financiamiento de cualquier municipio el intendente Enrique Martínez no es el único que pierde con esta situación; principalmente lo hacen los vecinos que no pueden ver sus impuestos traducidos en obras y servicios.
“Y lamentablemente estamos pidiendo que por favor si no están de acuerdo, que rechacen el presupuesto 2022, y automáticamente nosotros seguimos cobrando con los valores del 2019. Sería interesante que los concejales que están en oposición al presupuesto mostraran a la comunidad una alternativa al presupuesto; pero lamentablemente no lo hacen. El Concejo hace oposición, no presentado ningún tipo de trabajo, ninguna propuesta, ninguna manera de hacer frente a todo esta situación” señaló Silvia Pistan encargada de rentas municipal.
Valle de Lerma Hoy
