La madrugada del 28 de noviembre, un hombre de 24 años atacó brutalmente a su expareja. El sujeto vivía con su expareja en la vivienda de los padres de ella en El Carril y ambos habían salido esa noche. Sin embargo, el hombre regresó solo y, al encontrar a su expareja, en lo que habría sido un episodio de celos, la golpeó salvajemente dos oportunidades.
La madre de la víctima radicó la denuncia, manifestando que el acusado se presentó en el domicilio en estado de ebriedad. Al informarle que su hija no estaba, le pidió que regresara más tarde. Minutos después, la denunciante escuchó gritos provenientes de la parte trasera de la vivienda. Un vecino alertó a la mujer, informándole que el acusado estaba golpeando a su hija. Al acercarse, encontró a la víctima tendida en el suelo y rápidamente contactó al Servicio de Emergencias 911.
Un vecino declaró que, alrededor de las 2 de la madrugada, vio a un hombre y una mujer discutir. En un momento, el hombre golpeó a la mujer en el rostro, haciéndola caer al suelo, donde le propinó puntapiés. Al intervenir, el testigo gritó al agresor para que dejara de golpearla. Tras levantarse, la mujer comenzó a caminar hacia su casa, pero luego el hombre escuchó más gritos y vio nuevamente a la mujer en el suelo, siendo pateada en la cabeza. Al amenazar con llamar a la policía, el agresor huyó.
Posteriormente, el individuo se presentó en el hospital San Rafael y, según manifestaron los efectivos policiales, habría declarado que golpeó a su pareja por celos. Luego, fue demorado por el personal policial. El fiscal Daniel Escalante solicitó ante el Juzgado de Garantías en turno el mantenimiento de la detención del acusado y lo imputó por la presunta comisión del delito de lesiones leves agravadas por el vínculo y por mediar violencia de género.
Valle de Lerma Hoy
