Con las suspensión de las PASO, mucha gente se quedó sin el trabajito de todos los días; o al menos van a poder amasar menos platita de la que esperaban. Ya no se va a poder negociar y volver a negociar, sin PASO el negocio es uno solo, por así decirlo. Pero es negocio al fin; varios que se postulaban y después vendían sus votos, ahora o se postulan y ven cómo les va o desde ya va a tener que empezar a decidir con quién se asocian. A estas elecciones llegan los que más plata tengan para la interna.
Las elecciones en Salta serán el 16 de abril de 2023, sin PASO. Al menos esta vez la ley de los partidos abiertos no se realizará como tal, ya no veremos 300 candidatos, seguramente ahora veremos a los mismos de siempre y a uno que otro valiente que a la vieja usanza va a tratar de llegarle. Pero es un hecho que vamos a tener que elegir en el 2023 gobernador, intendentes, legisladores y concejales.
Las elecciones primarias, también llamadas PASO, fueron creadas en el 2009, tras la aprobación de la Ley N.º 26.571. En las mismas se definen básicamente dos cuestiones: qué partidos están habilitados a presentarse a las elecciones nacionales, que según la ley son aquellos que obtengan al menos el 1,5 % de los votos válidamente emitidos en el distrito de que se trate para la respectiva categoría. También quedará definida la lista que representará a cada partido político, de ahí lo de interna abierta.
Sin PASO, cada partido deberá realizar sus propias elecciones internas y convencer a sus afiliados que se acerquen a votar; menos gasto para la provincia, eso es seguro. Y como señalabamos, el que pueda desembolsar más dinero podrá ser el candidato. Seguramente será una buena oportunidad para que los partidos recuperen la fuerza que habían perdido en manos de los frentes, alianzas y demás acuerdos políticos, porque de nuevo ocuparan el rol determinante que desde hace hace una década vienen perdiendo en manos charlas de café y acuerdos de última hora.
Valle de Lerma Hoy