Con una ausencia del tren de más de medio siglo, entre La Merced y El Carril, varios kilómetros de vías del viejo ramal ferroviario C-13 fueron usurpados por grandes extensiones de sembradíos de tabaco y hasta por un loteo privado. Los alambres cruzan la propiedad del Estado en diferentes sectores del trazado ferroviario. Algunos de forma descarada pusieron hasta tranqueras para evitar el paso. En otros puntos las vías ya no existen, se robaron los rieles y los durmientes.
Desde Salta capital hasta su última parada, aquel pujante ferrocarril de la década del 50 en el siglo pasado, tenía 102 kilómetros de trocha. Entre Cerrillos, donde se divide el ramal C-14 hacia la Puna, y el C- 13 hacia Alemanía, faltan rieles y los espacios del trazado están usurpados en diferentes lugares. En El Carril, solo un sector de ingreso está alambrado por encima de las vías del tren.
El Carril cuenta con un espacio ganado al tiempo y al olvido en los predios del ferrocarril. Además de la estación Zuviría convertida en espacio de encuentros culturales, festivales y acciones por la comunidad, cuenta con un pequeño museo, una confitería, y parquizado. En ese punto el ramal C-13 desaparece hacia el sur yendo hacia Coronel Moldes. Las vías fueron invadidas por árboles y los rieles escasean.
Siguiendo a La Viña, hay sectores sin rieles, y hasta con puentes desguazados por ladrones. Solo El Carril, desde La Merced, necesita reparaciones los tres puentes existentes al llegar a la estación Zuviría. El monte cubre el viejo ramal. El impedimento inmediato son las usurpaciones de estas décadas pasadas, de tantas hectáreas de ambos lados del ramal del tren.
Valle de Lerma Hoy
