El insólito caso de la documentación pública sustraída del Concejo Deliberante toma ribetes cada vez más anómalos. Un edil consiguió una copia furtiva del Presupuesto 2018 realizada antes de su desaparición y la dió a conocer a la prensa. Aún no hubo denuncias ni se halló el resto de los documentos perdidos.
“Estoy comenzando a analizar cuenta por cuenta, si son beneficios o no para la comunidad y las obligaciones nuevas del municipio. Lo loco de esta situación es que uno tenga que obtener el presupuesto gracias a gente de confianza con el temor de que te pregunten de dónde viene. Nunca estuvo dentro del concejo, ya se le pidieron explicaciones al presidente saliente y una copia al municipio, pero nada. Es un instrumento público, no deberíamos andar pidiendo por él”, indicó el concejal Ariel Gallardo a Valle de Lerma Hoy.
“El presupuesto es de más de 98 millones, 12 millones está destinado a obras públicas pero no hay detalles de qué obras, sin detalle no se puede controlar, ver si el uso de la plata es eficiente. Son apenas 7 carillas, sin detalles pormenorizados de cada punto. Se lo acerqué a la prensa, concejales y gremio municipal, porque aquí se establece 80 empleados efectivos y 30 contratados, menos de lo que hay actualmente. Hay que sentarse a analizarlo.”
Según Gallardo, las irregularidades son numerosas: “El ejecutivo deberá dar explicaciones y también el concejo saliente; lo aprobaron en menos de 20 minutos y tiene fecha de entrada un día sábado. Es un presupuesto aprobado entre gallos y medianoche.”
Valle de Lerma Hoy