Nadie puede dar información relacionada al expediente de la causa de abuso sexual con acceso carnal agravado por el número de participante, las partes involucradas en el proceso, tanto de la querella como de la defensa de los tres imputados acordaron no ventilar ningún tipo de datos o información relacionada con el caso, a los fines de preservar la integridad de la joven de 13 años ultrajada salvajemente el martes 8 de Mayo en Rosario de Lerma.
De los tres detenidos, Estrada, Moya y el menor de 17 años, están comprometidos por algunas pruebas que se sumaron con el correr de los días, pero la línea de investigación recién empieza, por lo tanto, el proceso puede tomar un rumbo distinto, sin que ello, necesariamente deslinde responsabilidades de los actuales detenidos.
Bajó la lupa de la justicia están los sujetos que frecuentaban el “aguantadero” de las 22 viviendas de Barrio Torino. Drogas y alcohol, aunque se han incorporado nuevos elementos que apuntan a hechos delictivos perpetrados por este grupo. Estos datos recién toman fuerza para otra línea de investigación, y que no tiene vínculo con el caso de abuso. Lo que se quiere demostrar, es que estos sujetos, también eran delincuentes de larga data, y que no fueron de casualidad sólo “abusadores”.
La causa está bien encaminada. Por eso se solicitó “cero información”, a tal punto que nadie puede dar ningún tipo de versión a los periodistas que dieron a conocer el caso. Hasta estos momentos, los investigadores están al acecho de dos implicados más, en este ataque sexual en banda.
La manada está desperdigada y sin su líder. Algunos tratan de entorpecer la investigación dando a conocer infundados trascendidos en las “peligrosas” redes sociales, que sólo apuntan a desprestigiar a algunos vecinos, sin motivo cierto. Si los exámenes auxiliares solicitados oportunamente esclarecen aún más al proceso, es casi un hecho, que los acusados, deberán esperar tras las rejas el día del juicio. Las cuartadas de los defensores serán las pruebas a la hora de decidir los tiempos procesales. Esto recién empieza. La fuerza de la opinión pública pudo más que las estériles razones esgrimidas por los acusados para zafar del hecho.
De comprobarse la responsabilidad de cada uno, en este ultraje en banda, podrían recibir condenas de seis a quince años, según el grado de participación de los implicados. Todos con ejecución efectiva.
Valle de Lerma Hoy