Desde 1959, la familia Cornejo cautiva paladares con una dedicación y cariño que se palpan en cada frasco de “Dulces Chicoana”. En la Finca San Antonio, ubicada en El Carril, esta empresa familiar se volvió un ícono de los dulces artesanales en Salta, elaborados con fruta fresca cosechada en su propia finca. Desde higos en almíbar hasta dulces de cayote y leche, pasando por frutillas al torrontés, su variedad es un fiel reflejo de la riqueza y sabor de los productos locales.
La historia comenzó con Fanny Becker, quien en 1959 inició la tradición familiar al preparar dulces caseros para amigos y familiares. En 1981, su nuera Josefina, llevó esta pasión un paso más allá, fundando la marca Chicoana. Hoy, Francisco y Segundo Cornejo, hijo y nieto de Fanny, continúan con esta tradición con el mismo esmero y las recetas originales que conquistaron generaciones.
Recientemente, el intendente de El Carril, Efraín Orosco, visitó la fábrica y reconoció el esfuerzo detrás de esta joya artesanal. En su visita destacó un proyecto de la familia que busca ampliar la producción e incluir alfajores, respetando siempre la esencia de la marca: productos 100% naturales, sin aditivos ni conservantes.
Valle de Lerma Hoy
