El presidente del Concejo Deliberante dijo que rechazaron el informe de Melisa Núñez porque no cuadraban algunos números y aclaró sobre los cuestionamientos que los ediles le hicieron a la defensora. Hay amparos abandonados y una abultada deuda que queda por pagar.
“Se la citó por la deuda que tiene y los pedidos de los acreedores que llegan al Concejo Deliberante para que tomemos intervención. Recordemos que el concejo le transfiere la partida y por eso se la llama y se le pregunta. El informe que nos presentó tenía errores, los números no cuadraban y se lo rechazó desde el concejo; por lo que se le pidió uno nuevo”, acotó Adrián Ustarez, presidente del Concejo Deliberante a Valle de Lerma Hoy.
“A la reunión también se invitó al anterior defensor del pueblo por los amparos que él había presentado que eran ocho y manifestó que la Defensora no les dió continuidad. Se sintió molesta pero aquí nunca se la atacó ni se le faltó el respeto, tuvo oportunidad de hablar y fue escuchada, también se le dió palabra a la otra parte y a los concejales que querían hacer preguntas. No fue un juicio para ella. Todo se fundamentó en el informe que había presentado y lo informado por el ex defensor.”
El ríspido control se radica en la abultada deuda que debe afrontar la Defensoría del Pueblo, que si bien viene de la gestión anterior, tiene que ser pagada: “Los acreedores son cerca de 5 personas y se calcula en casi 400 mil pesos. Tomé el compromiso desde el Concejo Deliberante de transferirle la partida en tiempo y forma, puesto que el anterior defensor no recibía partida y por eso también las deudas que se generaron, pero tiene que responder por ello.”
Valle de Lerma Hoy
