Al intentar buscar respuestas, se topó con una pared de mala comunicación con el cliente. Primero llamó a las líneas gratuitas de la empresa, pero no obtuvo ninguna explicación clara, lo derivaron a encuestas y, en un segundo intento, a un bot de WhatsApp que lo devolvió nuevamente al número gratuito. “En ningún momento pude hablar con un empleado real de Edesa que me explique qué significa este contracargo”, relató indignado a Valle de Lerma Hoy.
Segovia descubrió que no era él el único afectado. Otros vecinos también denunciaron la aparición de este ítem en sus facturas. Desde la oficina local de Edesa, en calle Buenos Aires, se le informó que estos cobros responderían a “un mal funcionamiento del medidor”. Sin embargo, la explicación abre más dudas que certezas, si el problema es técnico, ¿por qué la empresa nunca reemplazó el medidor ni envió un técnico?
Lo más grave es que, según relató el vecino, desde la oficina le sugirieron contratar a un electricista matriculado para reparar o cambiar los capacitores del medidor. “Eso es ridículo”, afirmó Segovia. “Todos sabemos que los medidores no pueden ser tocados por el usuario. Si hay un desperfecto, es Edesa quien debe hacerse cargo”.
La situación no solo generó enojo, sino también la sensación de estar bajo sospecha. “Básicamente es como si la empresa te acusara de robarles luz sin pruebas y te cargara un monto arbitrario en la boleta. No sabés qué estás pagando”, concluyó el vecino. Este nuevo conflicto refleja la falta de mecanismos reales de atención al cliente y responsabilidad técnica de Edesa, una empresa que suma cada vez más quejas en el Valle de Lerma por su manejo poco claro en la facturación.
Valle de Lerma Hoy
