Un chofer de una ambulancia del hospital Joaquin Corbalán de Rosario de Lerma totalmente borracho fue detenido por la policía de tránsito y una patrulla del 911 este viernes cerca de las 8 y cuarto de la noche. El acompañante del conductor, también ebrio hasta los cuéntanos, amenazó con llamar a sus influencias políticas si no los dejaban pasar porque se les hacía tarde para el asado organizado por ambos en una casa de Barrio Santa Rita de El Carril.
El chofer de la ambulancia identificado como Alberto Altamirano, jefe de mantenimiento del hospital rosarino afirmó a los policías que “estaba llevando a su acompañante a Barrio Santa Rita porque recién había terminado un trabajo de durlock en el nosocomio de Rosario de Lerma”. La prueba de alcoholemia dio 1,2 gramos de alcohol en sangre del chofer. Inmediatamente fueron demorados y se les secuestró la unidad que estaba en muy malas condiciones mecánicas.
Sorpresa fue de los inspectores de Tránsito de El Carril cuando al abrir la puerta del rodado se dieron con una gran cantidad de cervezas, varios kilos de buen asado, y pan fresco que estaba siendo llevado a una juerga de Barrio Santa Rita en El Carril. Al chofer Altamirano se le labró acta por 90 mil pesos por manejar un vehículo en pésimas condiciones mecánicas y por conducir en estado de embriaguez. La gerenta del Hospital de Rosario de Lerma, la Dra. María Eugenia Rivero, llegó después del incidente a El Carril a cerciorarse por el episodio ocurrido y que involucró a un jefe de área de este nosocomio “que hagan lo que tengan que hacer con este procedimiento, este personal sacó sin permiso esta ambulancia y deberá responder por su accionar irresponsable”.
Valle de Lerma Hoy