
Más de 20 hectáreas ya fueron consumidas por las llamas en diferentes puntos del municipio. Las zonas más golpeadas fueron la ruta 36, La Florida, kilómetro 8,5 de la ruta 51 y el barrio Aires de los Andes, donde el fuego llegó hasta las viviendas. Desde el área de Asistencia Social confirmaron que al menos cinco familias fueron afectadas directamente, aunque una de ellas sufrió la situación más crítica, parte de su vivienda fue alcanzada por el fuego y hoy necesitan prioridad en la ayuda.
La magnitud del problema se vuelve aún más peligrosa en un municipio con una jurisdicción extensa y de difícil cobertura, donde la combinación del pasto cubano seco y la negligencia en el uso del fuego convierten cualquier chispa en un incendio descontrolado. Los vecinos piden controles más estrictos y sanciones ejemplares para quienes insisten en prender fuego en lugar de limpiar como corresponde, mientras el municipio y los equipos de emergencia trabajan a destajo para evitar que las llamas produzcan una verdadera tragedia.
Valle de Lerma Hoy