Noelia ha decidido recurrir a la solidaridad de la comunidad, utilizando las redes sociales para pedir ayuda. Sorprendentemente, en menos de cuatro días, los solidarios vecinos de Campo Quijano se han unido y han aportado lo necesario para cubrir el costo de la silla de baño. Lo que la obra social no ha logrado hacer, se ha conseguido a través de la generosa ayuda de muchos vecinos.
Noelia ha expresado su profunda gratitud hacia aquellos vecinos que han sido los únicos en apoyarla en esta difícil lucha. “Cuando comencé a gestionar todo para mi hija, la obra social solo me respondió con negativas. Llegaron incluso a decirme que era la única madre que solicitaba tantos recursos. Luego, cuando expuse públicamente mi desesperación, me llamaron para pedirme tantos papeles relacionados con la enfermedad de mi hija, que me agoté al ver que solo estaban dando vueltas con documentación que ellos ya poseían sobre el padecimiento de Nicole”.
Finalmente, Noelia se vio obligada a recurrir a las redes sociales para solicitar ayuda, y lo que llevaba meses de espera, se logró en tan solo unos pocos días gracias a la solidaridad de los vecinos. Además de enfrentar dificultades para obtener el equipo médico necesario, Noelia y Nicole también se encuentran en una situación precaria en términos de vivienda. A pesar de estar registradas en el Instituto Provincial de la Vivienda desde hace años, aún no han podido acceder a una casa propia. Para subsistir, Noelia vende juguitos en las afueras de una escuela.