La usura es una práctica ilegal que consiste en cobrar intereses excesivamente elevados en los préstamos. Los usureros en momentos de crisis económicas son los predilectos a la ahora de “oxigenar para alivianar” cargas administrativas de algunas comunas con sus respectivos intendentes.
Mitigar la falta de dinero es el dilema de los jefes comunales cargados de presiones políticas y sociales. Pero si aparece un usurero amigo y le ayuda a palear la crisis con prestamos personales, no es para dejar pasar, total quién se va a dar cuenta?
De 9 municipios en el Valle de Lerma, hay dos que recurren a la usura. De esos fondos accesibles pero irregulares, son utilizados para obras que no pueden ser terminadas por diferentes motivos. Una de estas causas, es que Nación no envía fondos, y por angurrientos, dos jefes comunales deciden hacer la gran obra sin fondos estatales.
La información se desprende de los organismos del estado nacional de planificación que tienen en sus planillas obras de pavimento sin poder concluir los proyectos por falta de envío de fondos a esas comunas. Entonces? Cómo es que terminaron la obra? Si, Nación no remitió los dineros de la obra?
Los préstamos usureros sobrepasan los siete dígitos. Y en un caso particular, fueron entregados en un café de la calle Belgrano de la ciudad de Salta