Los reclamos datan de hace mucho tiempo. Sólo una frecuencia diaria para algún colectivo con pisos bajos. Un edil de El Carril, está diseñando una rampa graduada para solucionar el problema.
Para los discapacitados con sillas de ruedas resulta una verdadera odisea viajar en los diferentes corredores del Valle de Lerma que cubre el servicio de transporte de SAETA. Las empresas programaron diferentes horarios para mayor comodidad de los discapacitados, sin embargo este compromiso no se cumple. Sólo al mediodía aparece un colectivo con rampas o pisos bajos, que recorre el tramo desde El Carril hasta Salta Capital. Las quejas son interminables y recurrentes de los discapacitados. Del otro lado se escuchan respuestas de parte de algunos choferes que rozan la discriminación.
“Son pocos, que viajen en un horario central” fue el desgraciado comentario de un chofer de la línea que cubre el tramo Carril-La Merced del día jueves al mediodía.
No es la primera vez que se reclama por esta situación. Los pisos bajos los tienen varios colectivos. Lo que no se entiende por qué no se aplica el protocolo de inclusión que tantos bregan para darles a nuestros discapacitados las mismas oportunidades que el resto de la población.
“Hace mucho que estoy pidiendo por un colectivo con piso bajo. No soy el único en sillas de ruedas. Antes estaba uno en la mañana, otro al mediodía y una en la tarde. Podía hacer mis trámites temprano. Ahora sólo viene el colectivo con piso bajo al mediodía y algunos días. Me siento discriminado. Si no fuera por la ayuda de los vecinos que en andas me ayudan a subir al colectivo. Soy como un bicho extraño que debo pedir ayuda para trasladarme y hacer mis trámites en la ciudad de Salta” César Mamaní.
Valle de Lerma Hoy