El sargento Ariel Galián está acusado de dos hechos de abuso sexual simple, lesiones agravadas por el vínculo y el género, desobediencia judicial en concurso real en contra de su exmujer. Ella, Graciela Arroyo agente de policía, está acusada de lesiones agravadas y desobediencia judicial. Los dos fueron imputados por estas agresiones mutuas en la misma causa. La violencia entre Galian y Arroyo fue creciendo con el correr de los días, después que formalizaron su separación.
Galian tenía exclusión de hogar y prohibición de acercamiento a su expareja. Sin embargo el martes en la tarde intentó asfixiarla mientras ella estaba recostada en su cama. Al parecer un reclamo sin respuesta encolerizo al hombre. Pero el hecho no terminó con este violento ataque. Según relató Arroyo, luego el policía llevó al hijo de ambos, de 5 años, a la escuela. Al retornar a la casa de barrio 60 viviendas de la manzana 34 de la zona norte de esta ciudad, el sargento volvió a agredir a la mujer. La golpeó y abuso de ella con tocamientos impúdicos.
La agente comenzó a gritar mientras se resistía a la agresión. Esta circunstancia alerto a los vecinos para que llamen al 911. Por orden de la fiscalía penal los dos policías fueron sometidos a los exámenes de rigor ante los médicos legales. Se comprobó las lesiones en las dos personas. Además se tomó declaración testimonial a vecinos quienes admitieron haber escuchado gritos y una feroz pelea en la vivienda de la manzana 34 del barrio 60 viviendas que está ubicado a un costado de la ruta provincial 36 que une a esta ciudad con Quijano.
Valle de Lerma Hoy/ Fiscales Penales de Salta
