Las escuelas del valle siguen sufriendo los ataques de malvivientes que al parecer pueden ingresar con facilidad a los establecimientos y hacer de las suyas, estén donde estén.
Es lo que ocurrió en la escuela Bartolomé Mitre de Campo Quijano, donde a pesar de estar al lado del edificio municipal, los cacos entraron impunemente y robaron el kiosco escolar: “La policía me avisó a las 7 de la mañana que me habían robado el negocio, encontré la puerta forzada, habían palanqueado la ventana con un pedazo de madera y sacaron todo lo que pudieron del kiosquito. Me faltan como 10 mil pesos en mercadería, había plata pero no la encontraron, parece que no pudieron prender la luz”, relató a Valle de Lerma Hoy Francisco Arias, propietario del local que provee de fotocopias, útiles escolares y golosinas a los alumnos de la escuela.
El lugar fue inspeccionado por criminalística y habrían encontrado huellas dactilares que podrían orientar la investigación: “Dijeron que las huellas parecen de chicos, y piensan que fueron varias personas porque trataron de romper la chapa delantera primero y no pudieron, así que a palanca hicieron un pequeño espacio para entrar. Es la primera vez que pasa esto y es una preocupación porque les fue fácil, mañana le pueden robar a la escuela. Tienen que agarrar a la gente que hace esto porque uno viene a laburar y es terrible que te afanen con las cosas como están ahora. Lo difícil de masticar es tener que recuperar todo lo perdido”, enfatizó Arias.
Lo llamativo del suceso es que según las primeras presunciones de la policía, los ladrones habrían ingresado a la escuela a través del canchón de la municipalidad, al costado de la institución. Ambos predios están separados sólo por un alambrado bajo.
Valle de Lerma Hoy
